Todo empezó cuando nos subimos al autobús por la mañana. A mí, el viaje se me hizo muy largo. En una tele que había en el autobús vimos la película de Ratatui o también mirábamos el paisaje por la ventana que era muy bonito. Cuando llegamos, fuimos caminando hasta llegar a las mesas para merendar.
Para empezar las actividades, a nuestro grupo nos tocó hacer una prueba de nudos para luego hacer la cabaña. Hicimos el nudo del ocho y el ocho doble. Estuvo muy chulo.
Después hicimos “escalada”. Era muy bajita, pero me gusto mucho. La monitora nos contó una historia de una bruja llamada Úrsula. Y llegó la hora de comer.
Después nos fuimos a una actividad muy chula “la orientación”. Nos enseñaron a hacer una brújula. Primero nos hizo rascar una varilla con un imán, luego nos hizo meter la varilla en un corcho que metimos en el agua; y nos señalaba el norte y el sur. Luego subimos a la montaña e hicimos un juego con grupos de cuatro niños. Se trataba de que con una brújula nos orientásemos y encontráramos unas señales. Ganaba el que encontraba todas las señales. Mi grupo y yo solo encontramos dos, y eran cuatro. Ganó el grupo de Daniel.
A continuación, nos fuimos a hacer otra actividad que era muy chula: “pasar la red”. Era una red que estaba colgada y la tenías que pasar andando. Todos cuando subíamos nos caíamos a los cuatro segundos. Yo hice catorce segundos y Julia un minuto cuatro segundos.
Y luego, la última, fue bajar de la montaña a la carretera para llegar al autobús. Vimos muchas mantis religiosas, cogimos bellotas,... Subimos al autobús y vimos la película de Mister Bean. Estuvo muy divertida.
Al llegar, todos saludamos a nuestros padres y les contamos que la excursión había sido alucinante.Autor: Javier Casero Laguna
No hay comentarios:
Publicar un comentario